De casualidad llegué a la exhibición de una de las fotógrafas más grandes del siglo XX. Así también, de pura casualidad, la obra de Vivian Maier pasó de estar escondida en negativos sin revelar ocultos en un depósito, a ser exhibida en las galerías y museos más importantes del mundo.
Por: Jazmín Ruiz Díaz Figueredo
Autorretrato de Vivian Maier.
Turín es una ciudad italiana mundialmente conocida y visitada por varios motivos. Para los creyentes católicos, es un destino obligado pues alberga la Sábana Santa (también conocida como el Sudario de Turín). Los aficionados del fútbol la conocerán como el hogar de la Juventus. A nivel industrial, se ha posicionado como la sede de la marca de automóviles Fiat y de café Lavazza.
Sin embargo, ninguna de estas fueron las razones que me llevaron a decidir visitar esta ciudad en mi viaje desde Milano a Verona. La razón por la que fui a la capital de la región del Piamonte fue la oferta de museos con la que cuenta. Por un lado, Turín ostenta el título del museo más antiguo y el segundo más importante (después de El Cairo) dedicado a las antigüedades egipcias. También, cuenta con un maravilloso Museo del Cine ubicado en la Mole Antonelliana, un ícono arquitectónico que es a la vez insignia de la ciudad.
La Mole Antolleniana es el edificio más icónico de Turín. Fotografía por la autora.
Fue camino a la Mole Antonelliana, caminando sin rumbo y sin batería en el celular, que tuve un encuentro -sin planearlo- con una de mis fotógrafas preferidas. En la Sale Chiablese de los imponentes Museos Reales de Turín, la exposición Vivian Maier: Inédita aborda su obra en conjunto, haciendo un recorrido a través de personas y ciudades que capturó con su lente desde 1950 hasta finales de los 80, incluyendo postales de Turín que realizó durante un viaje a través de Italia.
Por su capacidad de conmover y crear belleza prestando atención a personajes que no son comúnmente retratados, Maier hoy es considerada una de las más grandes fotógrafas del siglo XX. Su mirada ha dejado un legado fundamental para entender la fotografía callejera como expresión artística; además de elevar el autorretrato a un nivel sublime.
Fotografía por la autora
Recorriendo la muestra que lleva su nombre, es innegable su genio artístico como fotógrafa. Razón que hace que la historia de Vivian Maier (Nueva York, 1926 – Chicago, 2009), y de cómo su obra llegó a los museos y galerías más importantes del mundo, sea sumamente insólita. Hasta hace poco, casi nadie había visto lo que Maier capturaba con su cámara, incluida ella misma. Solo cuando se subastó el contenido de la unidad de almacenamiento donde guardaba sus negativos y las imágenes comenzaron a publicarse, su trabajo salió a la luz. Esto fue en 2011, dos años después de su muerte.
Maier llegó a Estados Unidos cuando era niña, hija de madre francesa y padre austriaco, y trabajó como niñera en Chicago durante 40 años. En su tiempo libre, sin embargo, vagaba por las calles tomando fotografías, y llevaba a los niños que cuidaba a estos safaris fotográficos por la ciudad. Sus imágenes son magníficas postales cotidianas de una época, abarcando desde ingeniosas escenas callejeras hasta autorretratos poco ortodoxos que sirven a la vez como documento de la vida en la ciudad durante la segunda mitad del siglo XX.
La calle era un lugar propicio para la observación de la niñera/fotógrafa, porque es allí donde sucede todo. Ella tenía predilección por los barrios obreros de las ciudades en las que vivió: primero Nueva York, entre 1951 y 1956, luego Chicago, donde murió en 2009. Recorrió incansablemente sus barrios y calles desde todos los ángulos, aventurándose en ese fluir constante de la geografía humana, donde su tejido es transformado por individuos anónimos que simplemente se suceden o se cruzan a diestra y siniestra. En este teatro de lo ordinario, todos, sin saberlo, juegan un papel, convirtiéndose en protagonistas, aunque sea por una fracción de segundo.
En la exposición Vivian Maier: Inédita, el público tiene acceso por primera vez a los archivos invisibles pertenecientes a la fotógrafa. Estas nuevas perspectivas sacan a la luz yuxtaposiciones y conexiones: fotografías antiguas tomadas por Maier, Super 8 y películas de 16 mm que nunca se han mostrado. La muestra se presentó por primera vez en el Musée du Luxembourg, París, del 15 de septiembre de 2021 al 16 de enero de 2022. Yo tuve la suerte de verla un día antes de que cerrara la temporada en Turín, donde estuvo del 9 de febrero al 26 de junio. Mientras, desde el 11 de julio hasta el 25 de septiembre, la muestra Vivian Maier: Anthology se puede visitar en Reino Unido, en la MK Gallery.
Todas las fotografías © Vivian Maier.